Tras más de 20 años grabando discos, Saratoga presenta su último trabajo, Aeternus, que salió a la luz el pasado mes de noviembre.
Ahora lo presentan alrededor del país, y la ciudad elegida para comenzar la gira es Córdoba, en la sala M100.
Los primeros afortunados en disfrutar el concierto fueron aquellos que compraron el pase VIP. Estos entraron a la prueba de sonido, pudieron pasar un rato muy agradable con el grupo en el que charlaron, recogieron firmas y, justo antes de abrir las puertas al resto de asistentes, disfrutaron de dos canciones que el grupo tocó sólo para ellos.
Terminan los privilegios del pase VIP y abren las puertas. Se llena la sala y sin más dilaciones, comienza a sonar “A morir”, y tras esta, “Una vez fuimos héroes”.
Contaban que les habían dicho que en Andalucía estábamos en bañador y con mucha calor… “los cojones” decía Tete Novoa, alegando al frío de aquella noche.
Continúan las canciones sin apenas pausa entre ellas, “No sufriré jamás por ti”, “Maldito corazón”, “El vuelo del halcón”; tenían prisa, debían acabar puntuales ya que tras el concierto, en la sala, que cuando no hay ningún concierto es una discoteca, había programada otra fiesta.
Para presentar la siguiente canción, el cantante, mediante la pista de “la canción que dio nombre a un disco con la portada negra”, dejó que fuese el público quien adivinara de qué canción se trataba. Un asistente que se encontraba en primera fila gritó pronto el nombre, a lo que Tete le acercó el micrófono y el chico gritó bien alto “Vientos de guerra”.
Una pequeña pausa tras esta canción, casi obligada por el público, que se puso a aclamar al unísono “Saratoga”. La banda se mostraba agradecida, decía Tete Novoa que comienzan la gira con muy buen pie.
Sigue el espectáculo con “Morir en el bien, vivir en el mal”.
Nos confiesa la banda que hay diez pedazos de sus almas en este nuevo disco. También que hay una canción con un mensaje muy positivo, y es que la unión hace la fuerza, que hemos de estar siempre unidos, e ir siempre hacia adelante, “Siempre hacia el Sol”.
Tras tocar “Perro traidor”, salen los componentes, pero se queda el batería. El público comienza a aclamar animado a Dani, dándole pie a comenzar un enérgico solo de batería. De forma totalmente inesperada, comienza a sonar el ritmo de “We will rock you”; vuelve al escenario Tete, preguntando al público si tiene ganas de cantar, a lo que comienza a cantar esta famosa canción de Queen. Es el momento de presentar a sus compañeros, con Jero Ramiro a la guitarra, Niko del Hierro al bajo y Dani Pérez a la batería.
Continúa la música con “Tres ahorcados” y “Las puertas del cielo”. Es el momento de Niko, para darse a lucir con un solo de bajo, justo antes de “Si tú no estás”.
Comienza ahora el romanticismo. Pide Tete que bajen la intensidad de las luces del escenario y que sea Córdoba quien ilumine a Saratoga. Anima a sacar mecheros y móviles, llamando la atención de quien no sacaba el móvil. Insistía a una chica que se resistía a sacar el móvil para alumbrar, hasta que esta dijo que lo tenía sin batería.
Con la luz tenue en el escenario e iluminados por los móviles de toda la sala, tocaron “Si amaneciera” y “Acuérdate de mí”. Tete nos cuenta que Niko ha sido reconocido como el mejor bajista de España, y este hace alusión al reconocimiento como mejor cantante de España a Tete.
Nos cuentan que hay una canción que reivindica el cuidar a las mujeres y que va en contra del maltrato, el “Vals de la rosa herida”.
Rozando el final del concierto, dice el cantante que mucho heavy, pero aún no ha visto pegar saltos. Para ponerlo fácil, aumentan el ritmo de la sala con “Resurrección”, “Como el viento” y “Mi venganza”.
Dejando al público motivado y agotado tras este intenso final, terminan la noche con el primer tema del nuevo disco, “El olvidado de Dios”.