La emblemática banda española de heavy metal, Saratoga, celebró su 30 aniversario en un concierto inolvidable en la ciudad de Córdoba, junto al grupo Endernity. El espectáculo comenzó temprano, a las 19:30, cuando los VIPs entraron para presenciar a Saratoga tocando dos canciones que no estaban en el setlist oficial: «Morir en el bien, vivir en el mal» y «Rojo fuego», así como tener un Meet and great con la banda y recibir regalos.
A las 20:30 abrieron puertas al resto de asistentes y a las 20:50 dio comienzo la actuación de los teloneros, Endernity, quienes tocaron algunas de sus canciones más conocidas. Fue la primera vez que tocaban en tierras andaluzas y aunque la multitud no era demasiado grande al principio, la banda logró atraer a más espectadores a medida que avanzaba el concierto.
Durante su actuación, el cantante de Endernity cambió de guitarra para tocar una canción «más íntima»: la power ballad del primer disco, «I dream that I can fly». La dedicó a una persona en silla de ruedas porque la letra hace referencia al handicap que sufren estas personas. Endernity acabó su actuación cerca de las 22:00.
A las 22:20 comienza la proyección de un video de presentación que mostraba a antiguos miembros de la banda hablando sobre sus experiencias en ella. A continuación, Saratoga tomó el escenario con fuerza y energía. El batería Arnau Martí, quien se unió recientemente a la banda, salió al escenario y, tras una cuenta atrás que se hizo más larga de lo que era, salen Jero Ramiro a la guitarra y Niko del Hierro al bajo, y comenzaron a tocar «Tras las rejas» con Tete Novoa a la voz.
La banda se dedicó a repasar algunos de sus éxitos más destacados, como «A morir», «No sufriré jamás por ti» y «Maldito corazón», además de «A sangre y fuego», mientras la multitud disfrutaba de la música. Luego de «A sangre y fuego», Tete Novoa pidió un aplauso para Jero, quien celebraba sus 30 años en la carretera, y para Niko al bajo, antes de tocar «El vuelo del halcón».
En un momento emocional del concierto, Tete Novoa preguntó al público cómo era el amor en el sur – “En Madrid también está regular”- y pidió que Córdoba iluminase a Saratoga con sus almas, ojos y móviles mientras tocaban «Lejos de ti». La multitud respondió iluminando al grupo con las linternas de sus móviles, lo que hizo que la canción fuera aún más especial.
Tras esta canción Arnau, el nuevo baterista, tuvo su gran presentación con un increíble solo de batería, tras el que tocaron «Las puertas del cielo». Tete intercaló los nombres de los miembros de la banda en la letra de la canción, lo que hizo que la multitud se animase aún más. Tocaron algunas de sus canciones más reconocidas, como «Mi ciudad», «Si tú no estás» y «Vientos de guerra», la cual Tete quiso dedicar a su pie de micro con el animal protagonista de su disco “XXX”.
En un momento muy especial del concierto, Tete cantó «Si amaneciera», escrita por Jero hace muchos años, sentado sobre los altavoces, quedando junto al público de la primera fila. La multitud aclamó a Jero después de esta canción y la banda se despide con “Como el viento”, tras la cual, salen del escenario.
Sin embargo, vuelven rápidamente a la llamada del público que reclamaba su regreso, con «Perro traidor», durante la cual explotaban dos cañones de confeti.
Después de «Perro traidor», Tete preguntó a Jero cómo se sentía después de 30 años en la banda, a lo que él respondió que estaba muy feliz. Luego, Tete se aventuró al público en «Resurrección» antes de que la banda se despidiera definitivamente.
En resumen, Saratoga dio un espectáculo increíble en Córdoba, lleno de música poderosa, emociones y mucho talento sobre el escenario. A pesar de que el público no estuvo tan numeroso al comienzo de la noche, tanto Endernity como Saratoga lograron conectar con los asistentes y llevarlos a través de un viaje musical lleno de energía y sentimiento.
