El pasado día 29, Morgan regresaba por tercera vez a Córdoba para despedir su segundo disco, en las últimas fechas del Airtour. Nina asegura que espera repetir el ambiente que esta ciudad le da, que la anterior vez que estuvo aquí era el tercer o cuarto concierto de presentación y ya todos se sabían sus canciones.
No fue muy larga la espera al inicio del concierto, ya que tanto la apertura de puertas como la salida de los artistas al escenario, fue muy puntual.
Sin ninguna dilación, los artistas salieron a escena y comenzaron a tocar “Honey” a dos voces y una guitarra. Al finalizar esta, Ekain Elorza nos da un ritmo continuo de batería, durante el que se unen los demás músicos: Nina se dirige a su piano y Alejandro Ovejero (quien era la segunda voz en la canción) agarra su bajo; sirve de introducción para Cold, dando gran ánimo a la noche con un espectáculo lleno de ritmo, luces y aplausos.
Continúan con “Cheesecake”, tras la cual Nina agradece a todos por ir a su concierto (el primero de los muchos agradecimientos que daría al público a lo largo del concierto).
No cesan los cambios de ritmo, primero nos emocionan, y después nos hacen vibrar, tocando “Attemping”, hay quienes no se resisten a bailar. Pero, sin duda, quien más disfrutó esta canción fue David Schulthess, que derrochó cuerpo y alma en el solo de teclado, donde todos sus compañeros no apartaban la mirada de él, mostrándose orgullosos y felices de tener a tan gran teclista con ellos.
Al finalizar la canción, Nina reconoce estar muy nerviosa (tal vez de ahí la velocidad con la que la cantante hablaba) y haberse equivocado en la canción, “son cosas del directo” afirma.
Tras informar de que el año que viene no darán conciertos, se apagan las luces, quedándose una iluminación tenue de varios pequeños focos, y comienza a sonar “Goodbye”, seguida de “Work”.
Nina se percata de las ganas de cantar del público, así que les anima a cantar con ella “Volver”, canción con la que los músicos logran que sus fans les regalen el mayor aplauso hasta el momento. Esta emoción creada continúa casi en la misma intensidad durante “Home”, haciendo que los más impacientes no puedan esperar a que termine y comiencen a silbar, gritar y aplaudir en mitad de esta.
Cuando termina, la cantante se levanta, no tocará el piano en la próxima canción, “Thank you”, donde el gran Paco López dejará boquiabiertos a los asistentes con su impresionante solo de guitarra, en el que nos regala todo su sentimiento y pasión.
Una vez más, las luces se mitigan, en esta ocasión, para bañar el escenario de color azul, el color representativo de nuestro “Planet Earth”. De nuevo, cambian totalmente la atmósfera de la noche, de la tranquilidad que la anterior canción ofrece, al ritmo de “Blue eyes”, continuado de “Flying peacefully” y, tras “Oh oh”, advierte al público de que se acerca el final y les anima nuevamente a cantar con ella otra canción que era imprescindible en este concierto, “Sargento de hierro”, que, aunque se equivocara en la letra, nadie se percató, ya que estaban demasiado absortos en sus sentimientos, sin poder evitar algunas lágrimas entre los más emocionales.
En esta ocasión para no romper con el ambiente logrado, siguió la conmoción con “The child”.
Ahora sí, hemos terminado, pero la cantante pide que no nos olvidemos de ellos el año que viene por no hacer conciertos, e informa de que estarán trabajando duro para sacar un tercer disco. Los músicos están rebosantes de energía, la derrochan toda en “Another road”, en mitad de la cual aprovechan el ritmo de esta para fusionarla con “Love yourself to dance” de Daft Punk, y Nina no pierde la ocasión de irse al centro del escenario a bailar enérgicamente. Tras este “break” vuelve la cantante a su piano y terminan su canción, tras la cual abandonan el escenario.
El público, deseoso de que no acabe la noche, reclama una canción más; no pueden dejar a sus fans con las ganas, así que regresan, al frente Nina y Paco solamente, la iluminación les enfoca, y comienzan “Marry you” para despedirse. A mitad de la canción, se unen los demás instrumentos, acelerando el ritmo; Nina agradece a todos: productores, sala, técnicos de iluminación y sonido, etc. afirmando que son todos los putos amos, presenta a sus compañeros sobre el escenario y agradece, una vez más, al público. Terminan “Marry you” sin cesar el ritmo acelerado de la presentación.
Termina así una noche en la que los sentimientos estuvieron a flor de piel, con tiempo para llorar, reír y bailar; los fans de Morgan quedaron totalmente satisfechos con el directo, y el grupo estuvo muy a gusto con la acogida que la ciudad les ofrece por tercera vez.